Flora canaria > Bituminaria bituminosa
Bituminaria bituminosa (L.)
C. H. Stirt.
Familia FABACEAE
Tedera, Hierba cabruna, Hierba betunera, Trébol hediondo
Descripción |
Sus hojas, de color verde intenso y suavemente vellosas, nacen en las axilas de los tallos; son pocas, alternas, muy espaciadas entre sí y provistas de un largo peciolo pubescente finamente acanalado. Trifoliadas, con foliolos de estrechamente elípticos a ovado-lanceolados de hasta 6 cm de largo, enteros en el margen, mucronados en el ápice, y con nerviación remarcada en el envés.
Sus llamativas flores, de color rosa pálido, azul o violáceo, se disponen en cabezuelas densas más o menos globosas de 1,5-2 cm de diámetro, con unas 15-25 flores individuales cada una, y situadas al final de largos pedúnculos axilares erectos. Cada flor presenta un cáliz estrechamente tubular de unos 12-18 mm de longitud, velloso y rematado por cinco dientes estrechamente triangulares, y una corola de color azul violeta con el pétalo superior (estandarte) de color lila más o menos intenso.
Sus frutos consisten en vainas comprimidas ovoides de alrededor de 1 cm de longitud, terminadas en un largo y afilado pico ligeramente encurvado, y recubiertas de una áspera vellosidad, conteniendo una sola semilla de unos 2-4 mm de longitud.
Toda la planta desprende un intenso y desagradable olor como a betún o asfalto, especialmente las inflorescencias, que se acentúa notablemente después de secas.
Hábitat |
Ocupa tanto paredes y pedregales como prados secos, tierras baldías o huertas bien abonadas; también es frecuente en áreas ruderalizadas, así como en bordes de caminos y carreteras.
Floración |
Reproducción |
Usos |
Hasta no hace mucho tiempo los campesinos sembraban campos de tederas que se segaban cuando las matas estaban en plena floración, y luego se dejaban secar al sol durante varios días. Después se empacaban para guardarlas como forraje invernal, que se apreciaba por la gran cantidad de leche que producían los animales que se alimentaban con él.
Propiedades medicinales |
Emplastos de sus hojas machacadas son anticoagulantes, deteniendo rápidamente las hemorragias causadas por pequeñas heridas externas. Por eso los campesinos, cuando se hacían algún corte con sus hoces, podonas o machetes, rápidamente hacían un "remuelo" masticando algunas hojas de tedera y se lo ponían sobre la herida, que al poco dejaba de sangrar.
Distribución |
Notas |
La primera se distingue del tipo por tener tallos poco lignificados, delgados y arqueados, que brotan de un tallo principal muy corto; sus hojas lustrosas y algo crasas, glabras o con algunos pelos dispersos, y sus flores blanquecinas de mayor tamaño.
La variedad albomarginata se diferencia principalmente por sus hojas seríceas, con los bordes densamente pelosos, sus inflorescencias con los pedúnculos dispuestos en forma corimboide, y su floración de color rosa.
Estudios realizados por científicos de varias universidades españolas, entre ellos el Instituto Canario de Investigaciones Agrarias (ICIA), han demostrado que esta especie posee determinados principios activos que pueden ser utilizados para el tratamiento de varias enfermedades de la piel, como la psoriasis, el vitíligo y las micosis fungoides. También en enfermedades autoinmunes, como la colitis ulcerosa y la enfermedad de Crohn, o para evitar el rechazo en los trasplantes de órganos. Y se está investigando su aplicación en determinados casos de cáncer, como el de piel.
Sus llamativas flores son muy visitadas por abejas y otros insectos, y por una mariposa de color amarillo pálido endémica de los bosques de Laurisilva canaria, la Gonepteryx cleobule, llamada popularmente limonera.
Etimología |
Sinonimia |
Distribución: Nativa. El Hierro, La Palma, La Gomera, Tenerife, Gran Canaria, Fuerteventura, Lanzarote.
Ecosistemas: Cardonal-tabaibal, Bosques termófilos, Fayal-brezal, Pinar, Retamar-codesar.
Altitud: Normalmente entre los 100-2.000 m s. n. m.
Texto y fotos: J. Alfredo Pérez Martín