En los países asiáticos, especialmente China y Japón, en una especie muy buscada por sus virtudes curativas, junto a otros hongos terapéuticos como Ganoderma lucidum, Lentinellus edodes o Trametes versicolor.

Según la tradición popular, que está siendo avalada por multitud de estudios científicos, su consumo tiene efectos antidiabéticos, disminuye la presión arterial, equilibra el sistema inmunitario, activa el metabolismo, baja los niveles de colesterol en la sangre, etc.
También se está usando a nivel clínico en el tratamiento de tumores cancerígenos.

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