Esta especie es originaria de los bosques tropicales de Venezuela, América Central y México. Se ha introducido en las Islas Canarias como planta ornamental, por su espléndido follaje y llamativas flores.
Se cultiva especialmente en lugares cálidos de las zonas costeras y de medianías de muchos países del mundo. Es una planta adecuada para cubrir vallas, muros y pérgolas. Puede crecer tanto a pleno sol como en semisombra.

Dadas sus grandes dimensiones, es indispensable controlarla mediante la poda, para evitar un crecimiento desordenado, y cultivarla sobre estructuras resistentes o paredes, por su peso y el tamaño que puede alcanzar.
Su nombre genérico (Solandra) está dedicado a C. Solander, botánico sueco discípulo de Linneo que participó en el legendario viaje del capitán Cook.

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