Plantita herbácea, vivaz, de unos 15-40 cm de
alto que produce un característico doble tubérculo de formas ovoides,
del que brota anualmente su parte aérea, formada por un tallo muy corto
alrededor del que se desarrolla una especie de roseta basal constituida por
hojas de color verde brillante, simples, alternas, largamente ovadas,
enteras, carnosas, muy lustrosas y sin manchas.
Sus pequeñas y llamativas flores,
de color rosáceo, con manchas o puntitos purpúreos en el labio inferior,
se disponen en la porción final de un largo tallo florífero en forma de
espiga de hasta 20 cm de alto, que surge del centro de la roseta basal,
y con unas 5-20 flores cada una. Flores con sépalos laterales erectos, y
pétalos de oblicuos a ovados, forman una especie de casco, con
un labelo trilobulado y vistoso, de color rosa pálido a blanquecino, con
manchas rosáceas, y un espolón corto de parecida coloración.
Al fructificar
producen una gran cantidad de diminutas semillas.
Durante el verano,
después de la fructificación, desaparece por completo la parte aérea de
la planta.
Endemismo canario de tendencias netamente
rupícolas, frecuente en riscos y laderas rocosas del Pinar, los Bosques
termófilos y de la franja superior del Cardonal-tabaibal.
Su carácter
vivaz y pequeño tamaño lo hacen pasar desapercibido la mayor parte del
tiempo, salvo cuando sus coloridas inflorescencias despuntan entre el
resto de la vegetación herbácea.
Se desarrolla individualmente o
formando pequeños grupos.
Invierno y primavera, habitualmente entre los meses de febrero y abril.
Por semillas y tubérculos. La reproducción
por semillas es algo complicada, pues para germinar necesitan la
presencia de hongos micorrizógenos.
Se puede emplear como especie ornamental en
macetas o en
jardines de rocalla de las zonas de medianías, siempre que ello suponga
un absoluto respeto a sus poblaciones naturales.
Desconocidas.
Islas Canarias.
En las Islas Canarias existen ocho especies
de orquídeas silvestres, casi todas de pequeño tamaño y discreta
floración. Entre las cuatro que son endémicas de nuestro territorio se
encuentra esta llamada orquídea del pinar, llamada así porque con relativa
frecuencia se encuentra en este tipo de bosque.
Su nombre genérico (Orchis) proviene del
griego orchis (testículo), por el parecido que tienen sus dos
tubérculos con esta parte de los órganos reproductores masculinos,
circunstancia aprovechada por algunos autores antiguos para atribuirles
propiedades afrodisíacas, siguiendo la denominada teoría del signo, tan
extendida en otros tiempos. De estos dos tubérculos, uno, más grande y
rugoso que el otro, es también el más viejo, del que brota la planta
anualmente; el otro, algo más pequeño, terso y blanquecino, es el que
dará lugar a la planta del año siguiente. El específico (Canariensis)
alude a su localización exclusiva en las Islas Canarias.
Orchis patens, Orchis patens
canariensis, Barlia canariensis, Androrchis
canariensis.
Distribución:
Endemismo canario. El Hierro, La
Palma, La Gomera, Tenerife, Gran Canaria.
Ecosistemas: Cardonal-tabaibal,
Bosques termófilos, Pinar.
Altitud: Normalmente entre los
500-1.800 m s. n. m.
Texto y fotos: J. Alfredo Pérez Martín