Flora canaria > Especies > Aeonium holochrysum

Aeonium arboreum (L.) Webb & Berthel. ssp. holochrysum (H.Y. Liu) Banares
Familia CRASSULACEAE
Bejeque, Pastelera, Hierba pastelera, Verode
  Descripción
Arbusto leñoso, perenne, de 60-100 cm de alto, con un tallo central grueso y leñoso, y numerosos tallos secundarios, carnosos, cilíndricos y algo retorcidos, recubiertos de una gruesa corteza de color marrón grisáceo, muy marcada por las cicatrices que dejan las hojas muertas al desprenderse.
Sus hojas, muy carnosas y de entre 5-15 cm de longitud, se agrupan en la parte terminal de los tallos, formando apretadas rosetas de 10-20 cm de diámetro; son simples, de obovadas a oblanceoladas, cuneadas en la base, ciliadas en el margen y acuminadas en el ápice. Su color es de verde brillante o amarillo verdoso, manchado en numerosas ocasiones por unas finas listas rojizas, más patentes y oscuras cuanto más expuestas están a la luz solar. En verano se vuelven de color pardusco y comienzan a caerse, quedando las rosetas reducidas al mínimo, prácticamente convertidas en yemas.
Sus pequeñas y numerosas flores, de color amarillo oro, se agrupan en llamativas inflorescencias terminales de unos 10-30 cm de longitud, compacta, cónica u ovoide, puberulenta, sostenidas por recios tallos floríferos hojosos y glabros de unos 7-15 cm de largo que surgen del centro de las rosetas foliares. Cada flor presenta un cáliz con 9- 11 sépalos triangulares, glabros, de ápice acuminado, el mismo número de pétalos, de oblongos a lanceolados, amarillos, glabros, y estambres glabros con anteras amarillas. Al madurar producen una ingente cantidad de pequeñísimas semillas.
Ocasionalmente, sus tallos generan raicillas aéreas, que tienen la doble misión de servir de sostén a la planta y de absorber algo de humedad ambiental en los meses más secos.


 
  Hábitat
Endemismo canario frecuente y hasta abundante en las zonas baja y media de las islas, especialmente en las vertientes del sur y oeste; en las áreas orientadas al norte también es muy frecuente, aunque en cotas bastante menos cercanas a la costa.
Al igual que otras especies de su mismo género, es habitual su crecimiento sobre paredes, muros y tejados, a veces con tal abundancia que los cubre casi por completo.
  Floración
Su espectacular floración invernal se concentra en los meses de diciembre y enero.
  Reproducción
Por semillas y esquejes.
  Usos
Su uso ornamental es cada vez más frecuente; su cultivo es muy fácil y requiere pocos cuidados, debiendo moderarse el riego y el abono, pues de lo contrario los ejemplares adquieren dimensiones desproporcionadas que reducen su bello porte original. Aunque esta práctica no debería establecerse fuera de sus áreas de distribución natural, para evitar indeseables efectos de hibridación con otras especies de su amplio y diversificado género; así mismo, se debe tener en cuenta un riguroso respeto a sus poblaciones naturales.
En jardinería son mucho más utilizadas dos de sus muchas variedades: la var. atropurpurea y la var. Schwarzkopf, que tienen las hojas muy lisas, brillantes y de coloración verde rojiza, que puede llegar a ser hasta purpúrea o morada, si la planta está muy expuesta al sol. Se pueden cultivar en macetas como planta de interior en aireados y con luminosidad solar directa.


 
  Propiedades medicinales
El zumo de sus tallos posee cualidades dermáticas, pudiendo emplearse como emoliente, desinfectante, cicatrizante, etc.
  Distribución  REVISAR
Islas Canarias. Naturalizada en la región mediterránea, América del Sur, México, Nueva Zelanda, etc.
  Notas   REVISAR
Después de una reciente revisión taxonómica, se unifica en esta especie a las anteriormente denominadas Aeonium holocrysum, Aeonium manriqueorum, Aeonium rubrolineatum y Aeonium vestitum. Y al tiempo se divide en dos subespecies: ssp. arboreum, para la isla de Gran Canaria, y ssp. holochrysum, para las islas de Tenerife, La Palma, La Gomera y El Hierro.
Se hibrida con otras especies de su mismo género: Aeonium spathulatum y Aeonium simsii.

  Etimología    REVISAR
Su nombre genérico (Aeonium) proviene del griego y quiere decir eterno o que vive permanentemente, seguramente aplicado a este grupo de plantas por su enorme capacidad de adaptarse a cualquier situación ecológica, a su poder para desarrollarse incluso sobre la piedra más descarnada, y a su facultad para sobrevivir en cualquier circunstancia durante largo tiempo, casi "eternamente". El específico (Holocrysum) proviene de las palabras griegas holos (entero) y chrysos (amarillo) aludiendo a su aspecto cuando la planta se encuentra en plena floración, que la recubre casi totalmente.
  Sinonimia    REVISAR
Aeonium doramae, Aeonium manriqueorum, Sempervivum arboreum, Aeonium korneliuslemsii, Sempervivum mutabile, Sempervivum manriqueorum.

Distribución: Endemismo canario. Tenerife, La Palma, La Gomera, El Hierro.
Ecosistemas: Cardonal-tabaibal, Bosques termófilos.
Altitud: Normalmente entre los 300-1.200 m s. n. m.