Flora de las Islas Canarias
Descripción: Arbusto perenne, de porte globoso, abundante ramificación y hasta 1,5 m de alto, que con sus flores malvas resalta el verde colorido de sus acompañantes habituales: cardones (Euphorbia canariensis), cardoncillos (Ceropegia dichotoma), siemprevivas (Limonium fruticans), bejeques (Aeonium spp.), tabaibillas (Euphorbia aphylla), etc. Sus ramitas son finas y quebradizas, estando recubiertas de una corteza verde grisácea profundamente marcada por las cicatrices de las hojas caídas.
Las hojas, de color verde intenso, ásperas al tacto y unos 10-15 cm de longitud, se agrupan en la parte terminal de las ramas; son simples, sésiles o muy cortamente pecioladas, y con cuatro o cinco pares de lóbulos (pinnatilobuladas) estrechamente lanceolados o subenteros. Las hojas muertas permanecen largo tiempo aferradas a las ramas, ocultas bajo los ramilletes de hojas nuevas.
Sus llamativas flores se disponen en capítulos globosos de unos 3 cm de diámetro, asentados sobre un receptáculo ovoide situado al final de larguísimos pedúnculos florales de hasta más de 25 cm de longitud, rodeado por brácteas involucrales ásperas, decurrentes y con un apéndice fimbriado. En la fructificación, producen una gran cantidad de semillitas casi planas, negras y brillantes.
Ecología: Endemismo de Tenerife cuya área de distribución está limitada a riscos, andenes y laderas pedregosas del vértice noroeste de la isla: Buenavista, Teno, Masca, etc.
A pesar de su reducido ámbito se diferencian claramente dos variedades: la típica (var. canariensis) y la var. subexpinnatus, que se diferencia por sus hojas más o menos enteras y finamente aserradas, y cuyo hábitat se circunscribe a algunas reducidas áreas de El Fraile y Punta de Teno.
Floración: Primavera.
Reproducción: Por semillas.
Usos: Ornamental. Sin embargo, la facilidad para hibridarse con otras especies de su género, y el riesgo de contaminación genética que esto conlleva, hace desaconsejable su uso en jardinería fuera de sus zonas de distribución natural.
Propiedades medicinales: El cocimiento de sus hojas y flores se emplea popularmente para rebajar el nivel de azúcar en la sangre, atribuyéndosele también cualidades antibióticas.
Distribución: Canarias.
Sinonimia: Centaurea canariensis.
20-700 m

Nombres vulgares: CABEZÓN, CABEZÓN DE TENO, CENTÁUREA DE TENO

Cheirolophus canariensis Holub var. subexpinnatus (Burch.) Hans. et Sund.
CABEZÓN DE TENO

Descripción: Entre las más llamativas especies que adornan el singular paisaje de la Punta de Teno se encuentra este arbustillo perenne, de porte globoso, abundante ramificación y hasta 1,5 m de alto, que con sus flores malva-rosáceas resalta el colorido de sus acompañantes habituales: cardones, cardoncillos, siemprevivas, bejeques, tabaibillas, etc.
Sus ramitas son finas y quebradizas, estando recubiertas de una corteza verde-grisácea profundamente marcada por las cicatrices de las hojas caídas. Las hojas, ásperas, de color verde intenso y hasta 15 cm de largo, se agrupan en la parte terminal de las ramas; su lámina presenta una forma anchamente lanceolada, con los bordes enteros, o corta e irregularmente dentados. Las hojas muertas permanecen largo tiempo aferradas a las ramas, ocultas bajo los ramilletes de hojas nuevas.
Las flores se disponen en capítulos globosos de unos 3 cm de diámetro, sobre un receptáculo ovoide, recubierto de pequeñas cerdas y situado al final de larguísimos pedúnculo s florales de hasta más de 25 cm de longitud. Al madurar producen una gran cantidad de semillitas casi planas, negras y brillantes.
Ecología: Endemismo de la isla de Tenerife, relativamente frecuente en riscos y laderas pedregosas de la vertiente noroeste de Teno: El Fraile, Punta de Teno, etc.
El tipo -que se diferencia principalmente de esta variedad porque sus hojas aparecen divididas en cuatro o cinco pares de lóbulos más o menos lanceolados- es mucho más escaso, habitando sus escasos ejemplares en lugares recónditos del área central del macizo de Teno.
Floración: Primavera.
Reproducción: Por semillas.
Usos: Ornamental. Sin embargo, la facilidad para hibridarse con otras especies de su género, y el riesgo de contaminación genética que esto conlleva, hace desaconsejable su uso en jardinería fuera de su zona de distribución natural.
Propiedades medicinales: El cocimiento de sus hojas y flores se emplea popularmente para rebajar el nivel de azúcar en la sangre, atribuyéndosele también cualidades antibióticas.

Cardonal tabaibal
0-300 m
Tenerife
Endemismo canario